Derecho de Daños

La categorización más amplia divide a los perjuicios en daños de carácter patrimoniales y extrapatrimonial.

• Los primeros (daños patrimoniales) se refieren a toda disminución injusta en el patrimonio de una persona, ya sea presente o futura, a causa del daño. Son ejemplos de este tipo de perjuicios: Gastos pasados y futuros en atención al daño; Daños a la propiedad privada (el costo de su reparación o remplazo); Gastos médicos (en caso de daños corporales); Gastos futuros en atención al daño; Pérdida de ingresos esperados (por ejemplo, por imposibilidad temporal o permanente para trabajar por una lesión o por incumplimientos contractuales); Pérdida de sustento (en caso de muerte de familiares), entre otros.
• Los segundos (daños extrapatrimoniales) se refieren a las afectaciones emocionales graves que sufre la víctima a causa del daño. Son ejemplos de este tipo de perjuicios: las afectaciones psicológicas a causa de daños corporales (por ejemplo después de un accidente o una mala práctica médica); afectaciones psicológicas a causa de la muerte injusta de un familiar (por ejemplo derivada de accidentes); afectaciones psicológicas por difamación; privación injusta de la libertad (por prisión preventiva arbitraria o detenciones arbitrarias); en general, sufrimientos físicos o síquicos como angustia, ansiedad, humillaciones u ofensas semejantes.

Ante estos daños se puede reclamar una compensación económica que busque, en la medida de lo posible, restituir a la víctima a su estado anterior al daño, cuando esto no es posible la compensación tiene como fin primordial otorgar una justa indemnización a la víctima que le permita adaptar su proyecto de vida a su nueva situación (por ejemplo, en caso de daños corporales o muerte de familiares).

En materia de responsabilidad por servicios de salud usted podría sufrir daños indemnizables por:

• Fallas o negligencia médica, que son las originadas por errores de los profesionales de la medicina, por ejemplo, por lesiones corporales o muerte causadas durante una cirugía, errores en el diagnóstico de enfermedades, falta de información adecuada sobre posibles riesgos de un tratamiento, entre otras.
• Fallas extra médicas, que son aquellas relacionadas a la negligencia en las condiciones indispensables para proveer un servicio de salud de calidad en centros de atención de salud (clínicas, hospitales, consultorios etc..), por ejemplo enfermedades causadas por falta de asepsia en centros de salud; fallas en la seguridad inherentes a la prestación el servicio de salud; falta de medicamentos o indumentarias suficiente para realizar un procedimiento o afrontar sus riesgos; demora excesiva en servicio de ambulancia, entre otras.

Si bien los tratamientos médicos no pueden garantizar la recuperación del paciente, es común que existan fallas en el servicio de salud que provoquen lesiones que son indemnizables.

Si bien en el Ecuador la negligencia médica puede constituir un delito, la realidad es que un número muy reducido de casos las víctimas llegan a ser reparadas; esto se debe, por lo menos a dos razones:

1. Para declarar la responsabilidad penal por negligencia médica es necesario que la fiscalía cuente con el criterio de una terna de médicos expertos que concluyan la existencia de una mala práctica médica, lo que complica la carga probatoria en contra del médico.
2. El estándar de prueba para declarar la responsabilidad penal de una persona es mucho mas riguroso que el estándar civil para condenar a una indemnización (en otras palabras, se requiere prueba más contundente, lo que en casos de responsabilidad médica suele ser complicado).

Además, hay que tomar en cuenta que la referida terna de médicos que califican la mala práctica es usualmente renuente a concluir la existencia de mala práctica, pues la responsabilidad que se persigue en esos casos es de carácter penal, lo que implica la posible privación de la libertad de uno de sus colegas médicos.

En cambio, en una demanda civil por negligencia médica no se persigue la privación de la libertad del galeno sino una indemnización justa por los daños causados.

Además, la prueba de negligencia médica en una demanda civil puede ser menos rigurosa que en la vía penal y se aceptan presunciones judiciales que flexibilizan la prueba de los hechos, por lo que es más probable que la víctima obtenga una justa indemnización.

Finalmente, hay que indicar que una investigación penal y una demanda civil no son excluyentes, por lo que se pueden iniciar a la par.

1. Consultar con un experto tan pronto como sea posible con el fin de trazar un plan de acción adecuado a su caso.
2. No suscribir actas transaccionales para reparar el daño sin asesoramiento de un abogado experto en derecho de daños, pues esto limita la posibilidad de iniciar juicios para reclamar indemnizaciones justas.
3. Tomar en cuenta el tiempo de prescripción para iniciar acciones legales por responsabilidad médica, tiempo que puede variar dependiendo de si el daño se ocasionó en el sector privado o público.
4. No tomar decisiones apresuradas para lograr una indemnización, pues los daños corporales usualmente no se pueden apreciar en su totalidad si no ha transcurrido un tiempo considerable desde la lesión producida. Las posibles secuelas de un daño pueden tardar en aparecer.
5. No suscribir documentos luego de haber sufrido daños por negligencia médica; es común que los galenos o servicios hospitalarios requieran que usted suscriba documentos en forma posterior al daño, con el fin para evitar responsabilidad. Recuerde que documentos como consentimiento informado u otros que adviertan de los riesgos de un tratamiento se suscriben antes de aplicar el tratamiento.

Las transacciones extrajudiciales pueden ser beneficiosas, sin embargo, no se recomienda suscribir actas transaccionales en casos de negligencia médica sin contra con el asesoramiento de un abogado experto en Derecho de Daños.

Solo un experto puede asesorarlo en cuanto a los perjuicios reales con el fin de obtener una indemnización justa.

El demandado en casos de accidentes de tránsito puede diferir y no siempre se debe dirigir contra quien conducía el vehículo. En materia de responsabilidad Civil los empresarios responden por sus dependientes, por ejemplo si el accidente fue ocasionado por un vehículo del Estado o por una empresa de transportes, lo ideal es ir tras la empresa o el estado, pues existen mayores garantías de conseguir el pago de una indemnización justa que en los casos en los que se demanda a quien conducía el vehículo.

Contactar a un abogado experto en derecho de daños es esencial para trazar una estrategia que incluirá la determinación de quién es el demandado que tiene más posibilidad de cubrir con una indemnización.

Es común, en especial en accidentes en los que están involucrados servicios de transporte, que los abogados de la empresa responsable busquen a las víctimas o a sus familias (en caso de fallecimiento) buscando la firma de actas transaccionales.

La firma de actas transaccionales cierra las puertas a una demanda y usualmente contienen indemnizaciones injustas y exiguas que no representan los perjuicios reales de la víctima o los de su familia.

Por ello NO es recomendable firma actas transaccionales si el asesoramiento de un abogado experto en Derecho de Daños.

Si, los incumplimientos contractuales pueden causar perdidas que pueden ser reclamadas por vía Judicial.

Si, el mantenimiento y señalización de las vías públicas es responsabilidad de diferentes instituciones públicas como Municipios, Gobiernos Provinciales, Ministerio de obras públicas o concesionarios.

Por ello ante un accidente por falta de mantenimiento o señalización, debe asesorarse con un abogado experto derecho de daños ya que puede tener derecho a ser indemnizado.

Si, el mantenimiento y señalización de trabajos en veredas y espacios públicos es responsabilidad de los Municipios.

Por ello ante un accidente por falta de mantenimiento o señalización de trabajos en veredas, debe asesorarse con un abogado experto derecho de daños ya que puede tener derecho a ser indemnizado.

Lo más importante es contactar con un abogado en forma inmediata pues la prueba de este tipo de daños puede desaparecer con facilidad y es necesario realizar diligencias legales (peritajes, constataciones notariales, diligencias preparatorias etc..) tan pronto como sea posible con el fin de determinar las acciones y omisiones en la construcción contigua que causaron el daño.

Es importante también tomar los datos de los testigos presenciales del accidente, con el fin de identificarlos y contactarlos posteriormente.

Sí, siempre y cuando el dependiente cause un daño en ejercicio de sus funciones

En la mayoría de los casos sí, en especial por los hijos menores de edad.

Sí, y no solamente los dueños de estos animales, sino también quienes los tuvieren bajo su cuidado.

Sí, es necesario contactar con un abogado en forma inmediata pues la prueba de este tipo de daños puede desaparecer con facilidad y es necesario realizar diligencias legales (peritajes, constataciones notariales, diligencias preparatorias etc..)

En algunos casos se puede reclamar indemnizaciones por responsabilidad de la administración de justicia. Un ejemplo de esto son las personas que han sufrido privaciones injustas de su libertad.

Sí, El Estado no solo responde por las acciones de sus funcionarios públicos en ejercicio de sus cargos, sino también por sus omisiones.

Si, en estos casos es necesario definir los errores judiciales que se pudieron cometer, por ejemplo una interpretación absurda de la ley por parte del Juez o un grave error en la apreciación de los hechos.